/ La casa natal del pintor en Sevilla, abandonada /
Ojalá a estas cinco personas no las devore el cansancio en esta lucha titánica contra la dejadez y la desidia de quienes nos dirigen.
Tuvimos el viernes pasado la oportunidad de conocer a Enrique Bocanegra, y escuchar de su propia voz la aventura de rescatar la casa natal de Diego Velázquez, el pintor de pintores que dijera Manet, y hacer una casa museo, a modo de experiencia inmersiva similar a la que ofrecen otras casas museo, como la de Mozart en Salzburgo, Rubens en Amberes o la de Rembrandt en Ámsterdam.
Como explica el escritor, la idea surgió en junio de 2016, durante un viaje a Inglaterra que incluyó una visita a la casa en que naciera William Shakespeare, en Stratford Upon Avon.
Ante un reducido auditorio, Bocanegra -escritor y periodista sevillano- nos enseñó las estancias de la morada del pintor, bautizado que fue muy cerca de allí, en San Pedro.
Eramos seis personas las invitadas: una pareja muy joven, otra mujer igualmente muy joven, una mujer de nacionalidad británica (inglesa, concretamente) y quien suscribe y su esposa.
Toda una recompensa recibir las explicaciones de Bocanegra, este sevillano que, junto a varios amigos, está empeñado en suplir la negligente actitud y pasividad de los poderes públicos andaluces, que, hasta hoy, han rechazado proteger debidamente, restaurar y potenciar semejante tesoro, que podría convertirse en un reclamo cultural de la ciudad de primera magnitud en el orbe.
Nada extraño, si recordamos, por ejemplo, cómo el 1900 aniversario de la muerte del emperador que llevó a Roma a su máxima extensión, Trajano, pasó sin pena ni gloria en 2017. Ni siquiera se aprovechó la conjunción de la mundialmente exitosa serie fantástica Juego de Tronos filmada en Itálica -y también en las aún no restauradas Reales Atarazanas, otra vergüenza de la inepta gestión pública- para potenciar la figura de Trajano, el primer emperador no nacido en la península Itálica, y su sucesor, Adriano, e Itálica (recuerden, Sevilla).
Recorriendo las estancias y escuchando sus explicaciones y anhelos, fabulaba Bocanegra con que la “Vieja friendo huevos” o el “Aguador” pudieran haber tenido su inspiración en rincones de esta casa. Estas dos obras maestras son obras sevillanas, pintadas antes de la marcha, ordenada por el rey, a Madrid, ya con 23 años y pico (mucha gente cree que Velázquez era madrileño), del genio (son éstas, precisamente las dos obras mencionadas por el autor de «España una historia global», un libro que me ha sorprendido y gustado enormemente; pero esta es otra cuestión).
De “milagro” calificaba el escritor y crítico Bocanegra que ésta que es la vivienda más antigua de Sevilla -título suficiente para su protección- no haya sido devorada por intereses crematísticos a lo largo de cinco siglos. Y, sin embargo, sí puede llegar a ser destruida por la negligencia del poder público.
El poder público no va a cumplir con su deber, como sí ha hecho en otro caso relevante (la casa natal de Picasso). No aportará, como le dijo un anterior consejero de ¡Cultura! de la Junta a nuestro héroe: ni compró el inmueble cuando salió a subasta, ni colabora en su restauración. Ni siquiera allegando mobiliario antiguo del que dispone, dado el inmenso patrimonio público histórico español.
Habrá de suplir su papel la sociedad civil sevillana, si quiere dotarse de este formidable recurso cultural y económico, de prestigio, y si quiere conservar su Historia; en eso confían estos cinco admirables rescatadores. ¿Lo harán los sevillanos y sevillanas, sus empresas, su tejido asociativo?
¿Sobrevivirá esta maravilla a la incuria pública? https://casanatalvelazquez.com/hazte-amigo/
Diversos medios que han recogido esta iniciativa. Aquí tiene ocho muestras.
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| Casa natal de William Shakespeare |
Ante un reducido auditorio, Bocanegra -escritor y periodista sevillano- nos enseñó las estancias de la morada del pintor, bautizado que fue muy cerca de allí, en San Pedro.
Eramos seis personas las invitadas: una pareja muy joven, otra mujer igualmente muy joven, una mujer de nacionalidad británica (inglesa, concretamente) y quien suscribe y su esposa.Toda una recompensa recibir las explicaciones de Bocanegra, este sevillano que, junto a varios amigos, está empeñado en suplir la negligente actitud y pasividad de los poderes públicos andaluces, que, hasta hoy, han rechazado proteger debidamente, restaurar y potenciar semejante tesoro, que podría convertirse en un reclamo cultural de la ciudad de primera magnitud en el orbe.
Nada extraño, si recordamos, por ejemplo, cómo el 1900 aniversario de la muerte del emperador que llevó a Roma a su máxima extensión, Trajano, pasó sin pena ni gloria en 2017. Ni siquiera se aprovechó la conjunción de la mundialmente exitosa serie fantástica Juego de Tronos filmada en Itálica -y también en las aún no restauradas Reales Atarazanas, otra vergüenza de la inepta gestión pública- para potenciar la figura de Trajano, el primer emperador no nacido en la península Itálica, y su sucesor, Adriano, e Itálica (recuerden, Sevilla).
Recorriendo las estancias y escuchando sus explicaciones y anhelos, fabulaba Bocanegra con que la “Vieja friendo huevos” o el “Aguador” pudieran haber tenido su inspiración en rincones de esta casa. Estas dos obras maestras son obras sevillanas, pintadas antes de la marcha, ordenada por el rey, a Madrid, ya con 23 años y pico (mucha gente cree que Velázquez era madrileño), del genio (son éstas, precisamente las dos obras mencionadas por el autor de «España una historia global», un libro que me ha sorprendido y gustado enormemente; pero esta es otra cuestión).
De “milagro” calificaba el escritor y crítico Bocanegra que ésta que es la vivienda más antigua de Sevilla -título suficiente para su protección- no haya sido devorada por intereses crematísticos a lo largo de cinco siglos. Y, sin embargo, sí puede llegar a ser destruida por la negligencia del poder público.
[Noticia recogida por RTVE; clique aquí]
Ojalá a estas cinco personas no las devore el cansancio en esta lucha titánica contra la dejadez y la desidia de quienes nos dirigen.El poder público no va a cumplir con su deber, como sí ha hecho en otro caso relevante (la casa natal de Picasso). No aportará, como le dijo un anterior consejero de ¡Cultura! de la Junta a nuestro héroe: ni compró el inmueble cuando salió a subasta, ni colabora en su restauración. Ni siquiera allegando mobiliario antiguo del que dispone, dado el inmenso patrimonio público histórico español.
Habrá de suplir su papel la sociedad civil sevillana, si quiere dotarse de este formidable recurso cultural y económico, de prestigio, y si quiere conservar su Historia; en eso confían estos cinco admirables rescatadores. ¿Lo harán los sevillanos y sevillanas, sus empresas, su tejido asociativo?
¿Sobrevivirá esta maravilla a la incuria pública? https://casanatalvelazquez.com/hazte-amigo/
Diversos medios que han recogido esta iniciativa. Aquí tiene ocho muestras.
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